
La Defensoría del Pueblo
informó que desde el 1° de enero de 2018 hasta marzo de este año han sido asesinados 276 líderes de
organizaciones sociales y de derechos humanos.
En Bogotá miles de alumnos de
universidades púbicas, docentes, indígenas y sindicatos marcharon en forma
pacífica desde diferentes partes de la ciudad para converger en la céntrica
Plaza de Bolívar, lo que dificultó el tráfico de vehículos.
En una pancarta que llevaban
varios estudiantes se podía leer «Mientras reine la desigualdad social, la
pobreza y la guerra, el pueblo gritará contra los indolentes del sistema».
La policía dispuso más de 20.000
efectivos en todo el país y destacó unos 3.000 en Bogotá.
Diógenes Orjuela, presidente
de la Central Unitaria de Trabajadores, dijo a AP «que uno de los motivos de
estas marchas y del paro de un día es rechazar las medidas económicas que está
empleando el presidente (Iván) Duque contra los colombianos de bajos recursos.
Además del rechazo a la muerte de líderes sociales y de derechos humanos por
parte de grupos ilegales y del narcotráfico».
Orjuela sostuvo que las
manifestaciones son pacíficas y que espera que «más de un millón de nuestros
compañeros participen en estas marchas».
Los manifestantes están en
contra del Plan Nacional de Desarrollo (PND) del Gobierno nacional, que según
afirman, incorpora una reforma laboral y una de la seguridad social.
Según Orjuela, dicho plan
«permite la contratación por debajo del salario mínimo y elimina el sistema de
seguridad social para los trabajadores, con lo que perderían su derecho a
pensión, riesgos laborales, licencias de maternidad, paternidad, e
incapacidades, y el derecho a la afiliación a Cajas de Compensación Familiar».
Esta es la primera huelga
nacional que enfrenta Duque desde que asumió el cargo, el 7 de agosto del año
pasado, y a ella se sumaron los maestros afiliados a la Federación Colombiana
de Trabajadores de la Educación (Fecode) que reclaman más recursos para ese
sector.
A su vez el presidente de la
Federación Colombiana de Educadores, Nelson Alarcón, indicó que 280.000
educadores participan en la jornada de protesta y además de los reclamos de
Orjuela demandó que «se respeten y se cumplan los acuerdos firmados por las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) con el gobierno del expresidente
Juan Manuel Santos».
El año pasado los estudiantes
colombianos de educación superior hicieron una huelga de más de dos meses en la
que alegaron que las universidades públicas necesitaban 3,2 billones de
pesos (unos 1.037 millones de dólares)
para no cerrar, y al final llegaron a un acuerdo con el Gobierno.
La huelga incluyó a más de
siete millones de estudiantes de la enseñanza pública en todo el país que no
pudieron asistir a clases.
En
Bogotá una multitud marchó hacia la Plaza Bolívar
En Bogotá la movilización
partió desde dos puntos: desde el Centro Administratvo Distrital, ubicado
en la Calle 26 con Carrera 30 y desde el Parque Nacional, para finalmente
concentrarse en la Plaza de Bolívar.
Aunque la movilización inició
formalmente a las 9:00 de la mañana, sobre las 7:00, un grupo de estudiantes se
movilizaban por el carril exclusivo de Transmilenio a la altura de
estación Bosa, que, permaneció sin paso por la invasión del carril.
Sobre las 7:30 a.m, dejó de operar
la estación Calle 76 hacia el sur al presentarse bloqueos en este
punto también, y se suspende el paso por el carril exclusivo, que se
retoma en la Calle 74.
A las 8:25 de la mañana, en
la Avenida Caracas con Calle 72 se presentó una aglomeración de manifestantes
que se movilizaban de manera pacífica con el acompañamiento de la Policía
de Bogotá. Así mismo, en la sede tecnológica del sur de la Universidad
Distrital se reportó una aglomeración de 200 personas.
El reporte de las 9:30 de la
mañana indica una aglomeración de manifestantes sobre la alle 26 con NQS, en el
sector del CAD, quienes iniciaron el desplazamiento hacia el norte. A
la misma hora, unidades del Esmad llegaron al Portal Suba, donde se presentó
una aglomeración de 50 personas que se desplazaban hacia el oriente, para la
estación 21 Ángeles.
“El
maestro luchando también está educando” Eso dicen algunos profesores que a esta
hora llegan a la Plaza de Bolívar en esta jornada del Paro Nacional.
A las
10:00 de la mañana, una caravana de buses provenientes de municipios
aledaños transitan por la carrera 68 con calle 48 hacia el norte, para
dirigirse a la Gobernación de Cundinamarca, donde a las 9:30 de la mañana se
asentaron unas 700 personas. A las 10:20, los manifestantes realizaron
bloqueos sobre la calle 26, sentido occidente – oriente.
También
se presentaron bloqueos en la Avenida Gaitán Cortés con Avenida
Villavicencio, protagonizada por un aforo aproximado de 300 personas que
invadieron la vía. Así mismo, 4.000 manifestantes que salieron del CAD se
desplazaron por la Calle 26 con Carrera 19 hacia el oriente, ocupando el carril
mixto. A las 11:10 a.m. Transmilenio realizó el cierre de las
estaciones Ciudad Universitaria, Corferias, Centro de Memoria y Concejo de
Bogotá. Sin embargo, sobre las 12:30 de la tarde se habilitó el paso y se desbloqueó la
Avenida NQS.
Al Parque Nacional llegan varias
personas, entre los que se encuentran representantes de la FARC, para
comenzar el desplazamiento hacia la Plaza de Bolívar. En este punto se reportó
un aforo de 1.000 aproximadamente.
El panorama desde el
Planetario de Bogotá sobre las 10:40 de la mañana era que más de 300
personas se encontraban a la espera de los estudiantes para el desplazamiento.
Sin embargo, sobre las 11:00,
el Planetario quedó vacía luego de que las personas que salieron desde el
Parque Nacional se empezaran a unir a la aglomeración. La marcha
tomó lentamente su curso hacia la Plaza de Bolívar, y la
protagonizan varios sindicatos, entre empleados de la rama judicial, del
sector de telecomunicaciones, financiero y miembros de la Confederación General
del Trabajo (CGT). A las 11:30, cuando la cabeza de la movilización estaba en
la carrera Séptima con calle 19, el grupo de sindicalistas y movimientos
se amplió, y al punto llegaron miembros del Movimiento Nacional de Víctimas de
Crímenes de Estado.
Al mediodía la marcha, que se
llevaba a cabo por la carrera Séptima, tuvo que ser desviada por las demoras en
el proceso de peatonalización y continuó por la Carrera Décima, lo que mantuvo
cerrado el Eje ambiental y las estaciones desde San Victorino hasta Museo
Nacional. En este punto, los manifestantes hicieron arengas contra la gestión
del alcalde Enrique Peñalosa.

A las 2:20 de la tarde, estudiantes de
la Universidad Pedagógica llegaron a la Plaza de Bolívar y protagonizaron
un enfrentamiento con las unidades del Esmad que custodiaban el Palacio de
Justicia. En total era un grupo de 10 uniformados, que tuvieron que pedir
refuerzos tras la ofensiva de los estudiantes, quienes lanzaron varios objetos
y hasta restos de comida.
Al mismo tiempo, Ángela María
Robledo se subió a la tarima para hablar sobre la decisión del Consejo de
Estado de anular su posesión como congresista de la República.
Con el paro se
busca poner en la mesa, una vez más, los reparos al Plan Nacional de
Desarrollo, alegando entre otras que la hoja de ruta pretende privatizar
la educación pública. Adicionalmente, desean hablar abiertamente de las conquistas y pactos ganados en
los anteriores pliegos de peticiones.
Si bien estas marchas quieren
visibilizar las condiciones que viven los docentes, también es una muestra
de solidaridad para los líderes
sociales que han sido asesinados. “No cesa el
señalamiento, la estigmatización a los educadores y la FECODE por parte del
partido de gobierno. Se continúa con las amenazas y asesinatos a defensores de
derechos humanos, líderes sociales, sindicales y populares en nuestro país”
asegura la Federación.
El
movimiento estudiantil se unió al gran paro nacional como una forma de estrechar los lazos de unidad con el
grueso del movimiento social, y para exigir el cumplimiento de los acuerdos
alcanzados con el Gobierno en diciembre del año pasado. En
ese sentido, la Unión Nacional de Estudiantes de Educación Superior (UNEES)
hizo un llamado para que todas las Instituciones de Educación Superior (IES)
públicas se sumaran al paro, y cesen sus actividades.
En un comunicado la UNEES
indicó los dos puntos claves por lo que adhirieron al paro nacional: El Plan Nacional de Desarrollo (PND),
que ha sido ampliamente criticado por sectores sociales; y el avance de un modelo de educación superior contrario a
los intereses de la mayoría de colombianos. Como lo explica el
vocero nacional de la Plataforma estudiantil, James Pareja, esta organización
participó en el encuentro de organizaciones sociales que se realizó en febrero,
en el que se acordó la fecha para el paro.
En el encuentro se decidió
que las organizaciones sociales se articularían contra el PND, y en favor de la implementacion
del acuerdo de paz, así como del cumplimiento de los
acuerdos alcanzados entre Gobierno Nacional y el movimiento social. Sobre estos
puntos, los estudiantes reclaman que el plan de desarrollo no contempla
la reforma integral del ICETEX (pactada
también con el Gobierno), ni la discusión sobre los artículos 86 y 87 de la Ley 30 sobre
educación superior.
¿Cómo lograr la articulación de sectores diversos en una
agenda de estos tres puntos?
Para implementar una hoja de
ruta que permita hacer una construcción programática sobre temas de agenda a
nivel territorial, se formaron Comités
Revolucionarios Populares (CORPUS) que deberán integrarse;
y con los que Pareja espera que se construya desde la diversidad escenarios de
lucha conjunta.
De esta manera los
estudiantes se unieron en la protesta multitudinaria de este jueves a campesinos, trabajadores, pueblos indígenas,
profesores de educación básica, comunidades afro y transportadores.
La
fuerza de la Minga se une al Paro Nacional
Después
de casi un mes de movilizaciones en que la Minga del Suroccidente del país intentó llegar a un acuerdo
con el Gobierno que fuera incluyente en el Plan Nacional de Desarrollo (PND),
las comunidades indígenas del país se han unido al Paro Nacional exigiendo,
además de las modificaciones al PND, medidas inmediatas para poner fin al
paramilitarismo, realizar ajustes a las políticas de seguridad en los
territorios, el desmonte del ESMAD y el respeto y derecho a la vida.
En el territorio nacional
A la movilización se han
sumado diversas comunidades en todo el país que marchan por la defensa de los
territorios destinados a la producción agropecuaria y reivindicando la
exigencia de una reforma agraria y un nuevo ordenamiento territorial que dé
prioridad a la protección del ambiente, los ecosistemas y del agua como un
derecho humano fundamental, de igual forma en defensa de la consulta previa
vinculante para los proyectos mineros-energéticos.
En Buenaventura, indígenas
de ACIVA RP se concentraron en el Puerto Cena, mientras en Antioquia,
provenientes del municipio de Valparaiso, el resguardo indígena Embera Chamí
respalda el Paro Nacional y en Cundinamarca el Cabildo Muisca de Suba se ha
concentrado en la Plaza Fundacional.
Por su parte en El Catatumbo,
en la planta extractora de Río Flores, cerca a Tibú, diversos procesos
sociales como el Pueblo Barí que junto a otros conforman la Comisión por la
Vida, la Reconciliación y la Paz del Catatumbo también han salido a
movilizarse.
Según
Rubiel Liss del equipo de comunicaciones del CRIC las movilizaciones en Cauca,
acompañadas por la Minga del Sur Occidente la jornada ha avanzado con
tranquilidad reuniéndose cerca de 3.000 indígenas en Popayán y otros 2.000 que
se unieron al paro desde la ciudad de Cali, «la Minga del suroccidente ha dicho
que continúa y en este momento nos encontramos en la disposición de reunirnos
con el presidente, seguimos en Asamblea Permanente», afirma.
En departamentos como Chocó, desde el 24 de abril
indígenas Embera se concentraron en tres puntos cercanos a Tadó en
cercanías a la vía que de Quibdó conduce a Pereira – Risaralda, manifestándose
para que se cumplan los Acuerdos de Paz, finalmente en Caldas el Pueblo Embera
Chamí de Caldas se moviliza en Riosucio y Manizales mientras en otros
departamentos como La
Guajira, la comunidad Wayúu se han unido para manifestar en
Riohacha.