Legisladores
del Partido Demócrata de Estados Unidos debaten entre ellos sobre el posible
inicio de un juicio político (impeachment) contra el presidente Donad Trump por
supuesta obstrucción en la investigación que realizó la Justicia sobre sus
nexos con Rusia en tiempos de la campaña electoral.
Si
bien el informe final del fiscal
especial Robert Mueller, cuyos datos preliminares se dieron a conocer en marzo,
determinó que no existió injerencia del Gobierno ruso en el proceso electoral
interno de Estados Unidos ni conspiración, subyace el intento de parte de Trump
en interferir sobre la investigación judicial.
En
su informe el Fiscal aclaró que no hay pruebas suficientes para acusar al
presidente de haber interferido en su investigación aunque tampoco lo exoneró,
por lo que algunos legisladores demócratas sostienen que hay movimientos de
presión que estar por encima del expediente del fiscal.
Las
conclusiones del informe fueron enviadas al Congreso con algunas partes
censuradas para no perjudicar la investigación que aún continúa.
El
Departamento de Justicia publicó la semana pasada una versión no completa del
informe de Mueller sobre su investigación, durante una conferencia que encabezó
el fiscal general de Estados Unidos, William Barr.
Durante
su discurso, Barr reiteró que el informe censurado no contiene “ninguna evidencia
de que ningún estadounidense, incluidos miembros de la campaña electoral de
Trump” conspirara con el Gobierno ruso.
El
presidente de la comisión de Justicia, Jerrold Nadler, consideró que el trabajo
es insuficiente, convocó al fiscal especial a responder algunas preguntas y
pidió al Departamento de Justicia una versión completa del documento.
Los
resultados del informe detallan lo que para algunos demócratas son esfuerzos
del mandatario por intentar correr de la fiscalía a Mueller o desactivar la
investigación.
Nadler
espera que el Departamento de Justicia cumpla con el envío del informe completo
antes del 1 de mayo, fecha en la que el fiscal general William Barr testificará
ante una comisión del Senado y un día antes ante Nadler.
Como
se dijo, Barr envió al Congreso la versión redactada del informe de Mueller en
la que descartó información clasificada, material relacionado con
investigaciones en curso y pruebas del gran jurado.
Ante
este camino sinuoso, los demócratas de más peso hasta ahora se muestran más
favorables a buscar que la investigación siga su curso y dejar el juicio
político como última opción.
Una
de ellas es la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien
rechazó hablar de juicio político y subrayó que el Poder Judicial se limitará a
cumplir con su rol de control y equilibrio de poderes.
Pero
algunas otras figuras del partido consideran que Trump no es apto para el cargo
y subrayan que el informe de Mueller no lo exonera.
La
representante por el distrito de Nueva York Alexandria Ocasio-Cortez sumó su
firma al pedido de juicio político elaborado por su compañera de bancada
Rashida Tlaib.
La
semana pasada se expresaron varios legisladores demócratas aunque sin una
estrategia definida, ya que varía según la opinión de los legisladores.
La
senadora Elizabeth Warren, precandidata presidencial demócrata, propuso que la
Cámara de Representantes iniciara un proceso de ‘impeachment’ contra Trump.
“La
gravedad de esta mala conducta exige que los funcionarios electos de ambos
partidos cumplan con su deber constitucional. Eso significa que la Cámara
debe iniciar un proceso de juicio político”, afirmó.
Insistió
en que “una vez electo, Donald Trump obstruyó la investigación sobre ese
ataque”, en referencia a lo que los demócratas consideran una injerencia rusa
que ya fue desacreditada por Mullen,
Luego
citó un fragmento del informe del fiscal especial en el que se dice: ‘El
Congreso tiene el poder de prohibir el uso corrupto de la autoridad por parte
de un presidente para proteger la integridad de la administración de justicia’.
El
presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam
Schiff, adelantó este domingo que el partido Demócrata se reunirá en las
próximas semanas para discutir si inician o no el proceso de ‘impeachment’.
“Hacer
lo contrario indicaría que, de alguna manera, la conducta de este presidente es
correcta, que los futuros presidentes pueden participar en este tipo de
corrupción sin consecuencias”, adelantó.
En
declaraciones a la prensa estadounidense luego matizó al preguntarse: “o
decidimos que estamos mejor supervisando en lugar de iniciar un proceso formal
de ‘impeachment’?”