La Corte
Suprema de Brasil dio el viernes un plazo de cinco días al presidente Jair
Bolsonaro para explicar su decreto que propone ampliar las categorías de
portación legal de armas.
Bolsonaro
firmó el martes pasado un cuestionado decreto que facilita la
posesión de armas para varios grupos de profesionales, como abogados,
camioneros, periodistas de investigación, políticos electos e incluso menores
de edad que practiquen tiro deportivo.
La
medida también establece que equipamientos de uso restringido a la Policía y el
Ejército puedan ser comprados por civiles, siempre que cumplan una serie de
requisitos, y propone ampliar la cantidad de municiones que pueden ser
compradas anualmente.
Varios
partidos políticos criticaron el decreto y pidieron al Tribunal Supremo que lo
anule, al considerarlo inconstitucional por herir el principio de la separación
de poderes, al entender que las reglas debían haber sido discutidas previamente
en el Congreso.
La
jueza del Supremo Tribunal Federal (STF) Rosa Weber, instructora del caso,
concedió cinco días a Bolsonaro para que preste informaciones, antes de decidir
si suspende o no el decreto. Weber también pidió informaciones al ministro de
Justicia, Sérgio Moro.
Paralelamente,
la Cámara de Diputados y el Senado también pidieron elaborar informes sobre el
decreto, y alegaron que la normativa «extrapoló el poder regulador» del
presidente, informó la agencia de noticias Xinhua.