El Departamento de Defensa de EEUU se
prepara para enviar a Colombia un barco hospital de la Armada estadounidense
con el objetivo de “ayudar a aliviar la crisis humanitaria que se vive en
Venezuela”, reporta Los Angeles Times. La decisión sobre el envío de ayuda
humanitaria habría sido tomada durante una reunión de altos funcionarios de
seguridad celebrada este viernes en la sede del Pentágono.
Las autoridades
norteamericanas han acordado dirigir a las costas latinoamericanas el buque
USNS Comfort, con 1.000 camas a bordo, con el propósito declarado de brindar
ayuda médica a los emigrantes de Venezuela, a los que el diario califica como
“refugiados”. Se prevé que la información sobre la nave, que será enviada,
supuestamente, a la costa norteña de la vecina Colombia, se anuncie la próxima
semana.
Según señala el medio, la
decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de “restar importancia a
la acción militar potencial” en Venezuela se produce después de que este
viernes mantuviera una conversación telefónica con su homólogo ruso, Vladímir
Putin. Durante el intercambio de opiniones sobre la situación en Venezuela, el
mandatario ruso condenó la injerencia exterior en los asuntos de la nación y
los intentos de cambio de poder.
Durante una rueda de prensa
celebrada en el Despacho Oval de la Casa Blanca después de su diálogo con
Putin, el líder norteamericano afirmó que a su homólogo ruso “le gustaría ver
que algo positivo sucediera para Venezuela” y que él también lo siente “de la
misma manera”, añadiendo su deseo de enviar “algo de ayuda humanitaria”.
Ayuda verdadera
Mientras, Caracas condena la
posición de Washington que, por un lado, insiste en la necesidad de emprender
una supuesta “intervención humanitaria” y, por otro, promueve un bloqueo de
fondos que agravaría la situación. El Gobierno de Maduro ha reiterado que la
mejor ayuda que puede ofrecer la Administración Trump pasaría por levantar las
medidas coercitivas unilaterales que impiden al país acceder a créditos
internacionales, mover sus activos financieros, y comprar medicinas y alimentos
para la población.
“Si yo quiero comprar algún
equipo especial para proteger a la mujer embarazada en el mundo, […] nos
persigue y nos impide o lo retarda”, denunció Maduro el pasado mes de
noviembre, después de lo cual solicitó ayuda a la ONU para hacer frente a las
sanciones estadounidenses.
“Pido apoyo al sistema de las
Naciones Unidas, porque ustedes saben que el imperialismo norteamericano, el
Gobierno imperialista de EEUU nos tiene perseguidos y bloqueados”, clamó el
mandatario venezolano.
El pasado mes de enero el
secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, confirmó el compromiso de
EEUU de proporcionar a Venezuela ayuda humanitaria por valor de 20 millones de
dólares. Esta suma coincide con los 20 millones de dólares que Caracas había
perdido de julio de 2017 a julio de 2018, solo en comisiones de operaciones cambiarias
para la compra de medicamentos, según las autoridades venezolanas.