Roberto
Carlos Palacios / Cátedra Che Guevara – Venezuela
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¿Todavía quedan dudas acerca
de la política de estímulo al capitalismo ejecutada por el Gobierno a través de
Castro Soteldo?
Hemos dedicado varios
editoriales al máximo escudero del reformismo en el gobierno, siempre sin
motivaciones personales, el objetivo es exponer el talante ideológico de las
políticas gubernamentales que pasan por debajo de la mesa donde hoy se discute
la “renovación y rectificación”.
Cuando Castro Soteldo fue
designado, el empresario de Alimentos Polar, Lorenzo Mendoza asistió al
programa de Vladimir Villegas en Globovisión, esto dijo:
“Mendoza: Por
cierto, yo veo con muy buenos ojos al nuevo ministro de agricultura Wilmar
Castro, ex gobernador del Estado Portuguesa, tiene conocimiento del estado
granero por excelencia de Venezuela. Lo he escuchado y lo he visto en algunas
intervenciones.
Vladimir Villegas: ¿Has hablado con él?
Mendoza: Tuve
la oportunidad de hablar con él en una oportunidad recientemente, y me parece
que tiene un enfoque correcto hacia levantar la producción nacional, diciendo y
reconociendo que tenemos fallas en este momento. Ojalá que el ministro tenga
todo el apoyo para llevar adelante la visión que tiene sobre el particular.
Pero, es primera vez en muchísimos años que oigo un discurso asociado, digamos,
a levantar el campo venezolano con realidades. Tiene que haber rentabilidad en
la agroindustria.
Villegas: ¿Tú
eres partidario de la privatización?
Mendoza: Yo
soy totalmente partidario a devolverle a sus antiguos dueños lo que les
pertenece, lo que no les han pagado, lo que pueden poner a producir ellos de
forma mucho más eficiente. Buscar los mecanismos, quizá algunos de ellos no
quieran, porque de alguna forma se sienten desilusionados del atropello que
sufrieron, pero que los llamen, que se sienten con cada uno de ellos, que vean
cuál es la solución, y si no buscar a otros que a lo mejor estemos en capacidad
de llevar adelante el levantar esos activos y ponerlos a producir.”(Ver video a través del link al final
del editorial)
Lo primero que hay que decir
es que Mendoza habla como si los capitalistas fueran los que trabajan y crean
valor en vez de los trabajadores y campesinos, sin embargo, lo que queremos
resaltar de lo expresado por el vocero de uno de los monopolios más importantes
de Venezuela, es que relata exactamente la línea de trabajo que ejecuta Castro
Soteldo.
Veamos ahora lo que plantea
el ministro de agricultura respecto a su política y comparemos con el
planteamiento de Mendoza, nos excusamos por la extensión de las citas, consideramos
que permiten despejar cualquier duda respecto a lo que pretendemos demostrar:
“En primer lugar en la definición y en la
caracterización de nuestra burguesía. En segundo lugar el objetivo de la patria
para su liberación, su emancipación, que es la liberación en lo económico, la
independencia en lo económico. La autarquía, para usar un término medio
pedante, es decir, la capacidad de producir todo lo que necesita, sin necesidad
de la dependencia de materia primas importadas (…) que es el espacio donde la
burguesía estéril amarra a la burguesía productiva, de allí la necesidad de
transformar el modelo, y de allí los 15 motores, la agenda económica
bolivariana, de allí el consejo nacional de economía, de allí las 10 grandes
líneas estratégicas que el compañero Nicolás Maduro en el programa de
equilibrio, de recuperación y de prosperidad económica ha lanzado, en donde
abarca de manera integral todos los aspectos necesarios para avanzar en una
economía transformadora, en una economía liberadora, en donde el obrero, el
campesino, el trabajador, la obrera, la campesina, la trabajadora, la burguesía
productora transformadora en alianza perfecta con el pueblo, con el gobierno
nacional (…) Miren esa tripartita: sector productivo nacional, pueblo, pueblo
organizado, gobierno nacional, en una alianza perfecta.”
“Esa burguesía nacional está llamada a asumir
el papel histórico, no de gananciero con estrechez de visión (…) sino como un
elemento de la sociedad transformador, productivo, aglutinador, que eleve los
estadios de vida de nuestra sociedad a otros niveles, junto al gobierno, junto
al pueblo. Allí puede estar la fórmula mágica.”
“De nuestro lado, del lado del Estado, de lado
del gobierno se han hecho todos los esfuerzos, de diálogo en primer lugar, de
relacionamiento directo, de facilitación de procesos, de carteras de créditos
dirigidas, de búsqueda de alianzas internacionales en los grandes mercados,
prácticamente la apertura de todas las trancas que había para el avance. La
inversión incluso, este es un ejemplo, una gran inversión que hizo el Estado se
ralentizó, y luego vino la inversión privada y la rescató y está trabajando de
manera mixta, ese es un esquema que puede funcionar (…) Es decir, debemos ir a
la construcción de esa nueva burguesía, una burguesía revolucionaria,
transformadora, que alcance los estadios de liberación económica de nuestro
país.” (1)
¡Miren esa tripartita! Dice
el ministro, para el gobierno y para él, “allí puede estar la fórmula mágica”,
en “la apertura de todas las trancas que había para el avance”, es decir, en
sentido contrario a las políticas de Chávez.
Para este acucioso rastreador
de una “burguesía revolucionaria” el quid del asunto radica en la capacidad de
negociación, en lograr un consenso, pactar, suscribir compromisos, de modo tal
que se pueda alcanzar una forma de organización social en la que, según
palabras de Lenin, los lobos estén hartos y las ovejas intactas.
Castro Soteldo además
pontifica respecto a Marx e infiere que el único que lo lee bien es él, si no
se tratara de asuntos tan serios daría risa la erudición autoproclamada de este
ministro al afirmar “aquí no se trata de un
socialismo dogmático como pretenden algunos teóricos sectarios del socialismo y
del comunismo, no se trata de eso, eso ni siquiera el mismo Marx lo dijo, ni
siquiera eso. Pero parece que hay personas que se leyeron un sólo capítulo de
Marx pues, y no se leyeron las críticas que Marx hacía a los dogmas y caen en
posiciones determinísticas. Esta es una revolución que no tiene posiciones
determinísticas”. (2)
En otras palabras, no se
puede criticar el avance de su política reformista que estimula añejos y nuevos
capitalismos. Para nosotros al ministro le son enteramente aplicables las
célebres palabras del Manifiesto del Partido Comunista referidas al socialismo
burgués:
“Los burgueses socialistas quieren perpetuar
las condiciones de vida de la sociedad moderna sin las luchas y los peligros
que surgen fatalmente de ellas. Quieren perpetuar la sociedad actual sin los
elementos que la revolucionan y descomponen. Quieren la burguesía sin el
proletariado. La burguesía, como es natural, se representa el mundo en que ella
domina como el mejor de los mundos. El socialismo burgués hace de esta
representación consoladora un sistema más o menos completo. Cuando invita al
proletariado a llevar a la práctica su sistema y entrar en la nueva Jerusalén,
no hace otra cosa, en el fondo, que inducirle a continuar en la sociedad
actual, pero despojándose de la concepción odiosa que se ha formado de ella.”
Un proceso real de
rectificación pasa por superar la ideología reformista impenitente que lejos de
enfrentarse a la burguesía, reproduce de facto su modelo amparada en la
pirotecnia verbal que caracteriza a sus más conspicuos representantes.
¡No a la privatización disfrazada de modelo
mixto!
¡No al reformismo disfrazado de socialismo!
¡La continuidad de la revolución es la
Confederación!
Ver fragmento de la
entrevista de Vladimir Villegas a Lorenzo Mendoza
Fuentes:
(1) Tomado del segmento
número 3 del Programa Cultivando Patria Número 99, transmitido por Venezolana
de Televisión.
(2) Tomado del Programa
Cultivando Patria Número 124, segmento 3.