El
presidente Nicolás Maduro advirtió este miércoles sobre nuevos planes
conspirativos contra Venezuela durante una rueda de prensa con medios
nacionales e internacionales desde Caracas. Aseguró que John Bolton, asesor de
Seguridad Nacional de la Casa Blanca, está involucrado en un complot para
asesinarlo, por lo que citó al encargado de negocios estadounidense en el país.
Estas denuncias, calificadas
gravemente, se basan en informaciones provenientes de diversas fuentes
conectados a la gubernamentalidad norteamericana, por lo que el Congreso
estadounidense y la prensa deberían investigar al respecto.
El estilo del "demonio
encarnado"
El 9 de abril pasado el ex
asesor de Seguridad Nacional de la Administración Trump, H.R. McMaster, salió
del cargo para ser reemplazado por John Bolton. McMaster a su vez fue designado
el año pasado para ayudar a estabilizar dicha administración tras el despido de
Michael Flynn.
Bolton es conocido como un intervencionista de primera, se
desempeñó como embajador ante las Naciones Unidas durante el mandato del
presidente George W. Bush y su nombre estuvo flotando por distintos cargos
antes de que Trump tomara posesión del cargo, particularmente en política
exterior. Esto incluía la posición de Secretario de Estado, siempre como
fanático no oficial de Trump.
Algo de revuelo mediático
tuvo su designación debido a sus comentarios directos, y a menudo
extremos, que lo convierten en un dogmático del
"bombardeemos hoy y preguntemos mañana". Las credenciales
de Bolton en cuanto a política exterior son tan extremas que han
hecho que el finado John McCain parezca un ser candoroso. Hace
poco sugirió el ataque estadounidense tanto a Irán como
a Corea del
Norte, por ejemplo, y durante un discurso en 1994 hizo
comentarios como "no hay Naciones Unidas".
Cuando trabajó en el gobierno
de Bush hijo como subsecretario de Estado para el control de armas y la
seguridad internacional, Bolton impulsó
la guerra de Irak y dijo a la BBC que estaba
"confiado" en que Saddam Hussein tenía "armas ocultas de
destrucción masiva". Tanto los senadores demócratas como
republicanos objetaron su nombramiento como embajador de la ONU
en 2005. También ha estado vinculado a organizaciones
anti-Islam e impulsado una teoría de conspiración
anti-musulmana, según BuzzFeed
News.
En 2016, Bolton habló en la
conferencia de la American
Freedom Alliance, que dice que "promueve y defiende los valores
e ideales occidentales", pero el Southern Poverty Law Center lo ha calificado
de "grupo de odio". Allí bromeó diciendo que el presidente
Obama era un musulmán. Durante su discurso mientras hablaba sobre países
musulmanes, Bolton hizo estallar a carcajadas a su selecto
público diciendo que "El rey Abdullah de Jordania, que no es
simplemente un rey musulmán de un país musulmán, a diferencia de nuestro
presidente".
Al reunirse con Bolton por primera
vez en Washington, James "Perro Loco" Mattis, actual secretario de
Defensa de Estados Unidos, bromeó: "Es bueno conocerte finalmente, ya que
he oído que en realidad eres el demonio encarnado".
Arquitecto de
la guerra total y omnipresente
En septiembre pasado la
Casa Blanca reveló su estrategia cibernética nacional con el fin de fortalecer
la ciberseguridad federal y disuadir a los "actores malintencionados"
de lanzar ataques digitales contra Estados Unidos. Al respecto, Bolton afirmó
que autorizarían operaciones cibernéticas ofensivas contra adversarios
extranjeros y confirmó que el presidente Trump había reducido las reglas de la
era Obama que restringían tales actividades.
El documento no menciona el
uso de operaciones cibernéticas ofensivas, pero enfatiza que la administración
usará "todos los instrumentos del poder nacional" para "imponer
consecuencias" a los ciberactores maliciosos. Hasta la fecha, eso ha
implicado imponer sanciones, emitir acusaciones y "nombrar y
avergonzar" a los vinculados a los ataques cibernéticos de Rusia y Corea
del Norte.
También dijo que el gobierno
había "autorizado operaciones cibernéticas ofensivas (...) no porque
queramos más operaciones ofensivas en el ciberespacio, sino precisamente para
crear las estructuras de disuasión que demostrarán a los adversarios que el
costo de su participación en las operaciones contra nosotros son más altas de
lo que quieren soportar".
En ese orden, la guerra ha
avanzado con ataques por distintos flancos como el comercial (sin dejar el
campo cibernético), Meng Wanzhou, directora financiera de Huawei Technologies
de China, fue arrestada en Canadá el sábado pasado a solicitud de las
autoridades estadounidenses y enfrenta una posible extradición a Estados
Unidos.
En una entrevista con Steve
Inskeep de NPR, Bolton se negó a explicar los motivos de su arresto, pero dijo
que Estados Unidos ha estado preocupado por lo que considera el robo de
conocimientos tecnológicos de su compañía. Huawei es uno de los principales
productores mundiales de teléfonos inteligentes y equipos de
telecomunicaciones. Meng es la hija del fundador de la compañía.
Es claro el despliegue
agresivo encabezado por Bolton diseñando una sola guerra en varios escenarios
como el cibernético y mediático. A la relación entre China y
Venezuela también se le ha querido involucrar por la vía mediática con señalamientos como
el que hizo la agencia Reuters recientemente a través del periodista Angus
Berwik, quien afirma que el Carnet de la Patria y la plataforma fortalecida por
la empresa china ZTE son utilizados para acceder a información estratégica de
la población y así chantajear económica y políticamente a los ciudadanos que
están inscritos en él. Un Fake News en toda la línea.
Embestida constante contra
Venezuela
A comienzos de noviembre,
Bolton se reunió con la derecha mayamera y les prometió que
el gobierno al que asesora tomaría una postura dura hacia los "dictadores
y tiranos que se encuentran cerca de nuestras costas", y se refirió a los
gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua como "la troika de la
tiranía". Esta demostración de fuerza ocurrió a menos de
una semana de las elecciones de mitad de período en Estados Unidos (midterm
elections), en las que el Partido Republicano
se jugaba el control del Congreso.
Allí anunció una nueva línea
de sanciones, intentó movilizar a estas diásporas a favor de Trump y anunció la
firma de una Orden Ejecutiva contra el oro venezolano por parte de la Casa
Blanca, anunciando que imponía nuevas y duras sanciones con el fin de impedir
que ciudadanos estadounidenses se involucrasen con quienes hacen
"transacciones fraudulentas y corruptas" con el metal.
En aquella conferencia en
Florida, Bolton agregó que "los Estados Unidos están emocionados de ser
socios de naciones como México, Colombia, Brasil, Argentina y otras
muchas" en el objetivo para hacer "avanzar el Estado de Derecho y
aumentar la seguridad y la prosperidad en la región para nuestra gente".
Luego de las elecciones en
Brasil y de una conversación con Bolton, el presidente electo Jair
Bolsonaro dijo: "Haremos lo posible por (resolver la crisis por) las
vías legales y pacíficas porque sentimos el reflejo de la dictadura instalada
en Venezuela".
Muertos, desaparecidos,
eliminación de derechos y endeudamiento hipertrófico es la Terapia Bolton para
"curar" a Venezuela. A confesión de parte, relevo de pruebas.