El ex
vicepresidente de Ecuador Jorge Glas abandonó su huelga de hambre tras 52 días
a pedido de sus familiares y amigos y ante los altos riesgos de daño para su
salud.
Glas
había iniciado una huelga el 21 de octubre como protesta por haber sido
trasladado de una cárcel en Quito a la unidad de máxima seguridad de Latacunga
ante el temor nunca demostrado de un peligro de fuga.
“Nuestro
vicepresidente Jorge Glas aceptó el pedido de su familia, amigos y compañeros
de lucha de levantar la huelga de hambre al cumplirse 52 días”, escribió en
Twitter el ex canciller Ricardo Patiño.
“Tu
valentía y dignidad es un ejemplo para todos. Seguiremos a tu lado hasta
que se reconozca tu inocencia y alcances la libertad”, agregó quien fuera
ministro de Exteriores del presidente Rafael Correa.
La
esposa de Glas, Cinthia Díaz, difundió un manifiesto en nombre del
exvicepresidente en el cual señala que esto “no significa que declino a la
lucha y a mis principios, todo lo contrario. Hemos conseguido que el mundo se
fije en lo que ocurre en Ecuador, es el primer paso hacia mi libertad y hacia
la justicia”.
En
el texto, Glas recordó que “llevo 14 meses preso con prisión preventiva y soy
inocente”.