Este
martes a horas de la tarde el Vicepresidente Ejecutivo Jorge Arreaza dio a
conocer por su cuenta de Twitter la noticia, luego del anuncio de cuarentena en
todo el territorio nacional que emitió el presidente el día de ayer.
La Izquierda Diario Venezuela
Venezuela cumple su segundo día de
“cuarentena social” en siete estados, pero su primer día de cuarentena en todo
el territorio nacional luego de que el pasado lunes el presidente anunciara la
aparición de 16 nuevos casos aumentando el número total de infectados a 33 (hoy
se anunciaron tres más, para llegar a 36). El sistema de salud pública se
encuentra en precariedad extrema por la falta de inversión y la terrible crisis
económica en la que está sumido el país. A esto se suman las acuciantes
restricciones para el financiamiento y renegociación de la deuda y otras
fuertes sanciones de EEUU que agravan la situación para el grueso de la
población.
El presidente Maduro pretende responder a la crisis solicitando 5
mil millones de dólares al Fondo Monetario Internacional, organismo harto
conocido por sus políticas de sumisión financiera y expoliación a los países
suramericanos, que mediante sus “programas de ajuste estructural” ha sido
responsable e impulsor consciente del desmantelamiento de los sistemas
sanitarios en todo el mundo, con consecuencias catastróficas en el control de
epidemias. En Venezuela en particular, el FMI es
recordado como uno de los arquitectos del Paquetazo de CAP II, resistido por la
rebelión popular del Caracazo, aplastada a sangre y fuego por las FF.AA.
aquellos días de febrero del 89.
Según lo que se conoce, el gobierno nacional hace la solicitud para
acceder al IFR, “Instrumento de Financiamiento Rápido”, una figura que según
los propios estatutos del organismo “proporciona asistencia financiera rápida y
de acceso limitado a países miembros que enfrentan una necesidad urgente de
balanza de pagos, pero que no necesitan aplicar un programa propiamente dicho”,
más adelante en el documento podemos leer estas líneas “…además de la
asistencia de emergencia en el marco del IFR, el FMI puede brindar asistencia
técnica para fortalecer la capacidad de aplicación de políticas macroeconómicas
integrales del país”. No se trata en absoluto de un cheque en blanco.
Con esta movida, de dársele, cosa que no está para nada segura aún,
Maduro apostaría a conseguir, por la vía de los hechos y amparado en la
emergencia, el reconocimiento internacional que le viene siendo negado hace más
de un año por la política de aislamiento y no reconocimiento de las principales
potencias capitalistas de occidente, al tiempo que un canal de financiamiento,
lo que también le viene siendo negado y necesita bastante. Esta línea de
crédito podría incluso abrir camino a negociar con el imperialismo una serie de
compromisos (tanto económicos como políticos) de parte del gobierno.
Estos movimientos revelan la naturaleza del régimen chavista, no
como uno enfrentado de principio a la dominación imperialista, sino uno que
aspira a coexistir y congraciarse con ella, aunque ello signifique seguir
sumiendo a las masas en la precariedad, en favor de mayor endeudamiento con el
capital financiero.