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El decreto de emergencia económica deroga al Plan de la Patria 2013-2019

Haré seguidamente algunas precisiones para evaluar el alcance del decreto de emergencia económica, apuntando a lo que parece ser en definitiva una maniobra de repliegue "en orden" y restauración suave de la hegemonía del capital. El decreto tiene las características de una "bomba de humo" con al menos dos implicaciones: 1.- su justificación efectiva, pues, más que acciones concretas, se presenta en la forma de una carta de intención cuyo cumplimiento se puede dar sin inconvenientes en el marco de la legislación vigente; y 2.- se desmarca en lo ideológico y en la praxis del Plan de la Patria 2013-2019 ([P.P.]). La segunda implicación viene a ser el pivot del repliegue. El dispositivo que corona la maniobra es la reciente conformación del Consejo Nacional de Economía Productiva, donde la representación de la "clase obrera" se reduce a la minúscula figuración de un par de destacados burócratas sindicales, verdaderos convidados de piedra.
Razono:
  1. ¿El gobierno recién ahora se plantea la transición de un modelo rentista a uno productivo? Pues veamos lo que reza el Plan de la Patria 2013-2019 ([P.P.]):
"GRAN OBJETIVO HISTÓRICO N° 2
II. Continuar construyendo el socialismo bolivariano del siglo XXI, en Venezuela, como alternativa al sistema destructivo y salvaje del capitalismo y con ello asegurar ‘la mayor suma de felicidad posible, la mayor suma de seguridad social y la mayor suma de estabilidad política’ para nuestro pueblo."
Objetivo Nacional:
2.1. Propulsar la transformación del sistema económico, en función de la transición al socialismo bolivariano, trascendiendo el modelo rentista petrolero capitalista hacia el modelo económico productivo socialista, en el desarrollo de las fuerzas productivas."
Pues bien, el contenido del decreto de emergencia, el nuevo Consejo y recientes declaraciones de algunos ministros es claramente claudicante, da a entender que es ahora cuando hay que pasar de un modelo a otro, descubriendo el agua tibia, cuando es uno de los objetivos fundamentales del [P.P.], pero no a cualquier "modelo produtivo", sino a un modelo productivo socialista. ¿Queda el [P.P.] en su objetivo histórico Nº 2 derogado de facto? ¿Es imposible para el gobierno recobrar la ofensiva económica con la carta de navegación del [P.P.]?
(Nota: los destacados son míos).
  1. Analicemos algunas claves:
  • Ha dicho Maduro: "se debe forjar un modelo que promueva reglas de juego claras para la inversión privada, mixta y que pueda convertir al aparato económico socialista del Estado en motores eficientes productores de riquezas bien administrado, bien gestionado." (06/01/2016) ¿A qué modelo se refiere? ¿Acaso no está claro el modelo en el [P.P.]? ¿Es el "aparato del Estado" un modelo "socialista"? ¿Acaso hay que "convertir" el "aparato socialista" en un motor eficiente? ¿No será que hablamos más bien de "capitalismo de Estado"? Apuntemos a las respuestas consultando otra vez al [P.P.], que en su objetivo 2.1.4.2. se propone "propiciar un nuevo modelo de gestión en las unidades productivas, de propiedad social directa e indirecta, que sea eficiente, sustentable y que genere retornabilidad social y/o económica del proceso productivo." Es decir, el [P.P.] contempla la necesidad de propiciar un nuevo modelo de gestión, no de reformular un presunto "aparato de Estado socialista". Por otra parte el [P.P.] prescribe un marco para las relaciones con el "sector privado", no sólo reconociendo, sino estimulando a los pequeños y medianos actores: "2.1.4.5. Desarrollar un sistema de estímulos para el fomento de las pequeñas y medianas industrias privadas y empresas conjuntas, en un marco de máxima corresponsabilidad social del aparato productivo, reconociendo el trabajo de mujeres y hombres emprendedores." El [P.P.] no establece de manera nebulosa "forjar un modelo con reglas claras", sino la máxima corresponsabilidad social del aparato productivo.
  • El decreto contempla un llamado a las empresas del sector privado a incrementar sus niveles de producción. Esto es un comodín retórico, un saludo a la bandera, no es una acción contingente al no depender ni del gobierno ni del poder popular. Está atada a la voluntad de los dueños del capital, y lo más claro hasta ahora es que el propósito de sus principales exponentes es seguir socavando la economía hasta donde sea posible para tomar de un todo el poder, bien sea con la figura de algún "Macri" sacado de la "chistera" o con cualquier espantajo de la MUD. Lo suyo no consiste en elevar la producción, que ya lo hubieran hecho, sino restaurar el coloniaje petrolero para ponerle la mano directamente a más de 300 mil millones de barriles en reservas de hidrocarburos junto a los lobos trasnacionales. Estos exponentes no han conspirado en solitario, lo han hecho con la Casa Blanca, con los think-tanks, con la Exxon, con las grandes farmacéuticas, con Monsanto, con los propietarios de grandes medios de España, de Estados Unidos, de Colombia, etc., y dicha entente trasnacional, el verdadero partido de cuadros de la burguesía en Venezuela, no dejará de actuar hasta alcanzar su victoria final, hasta llegar a las últimas consecuencias en un abanico de opciones de suma-cero. Pues entonces, si el gobierno ha dicho que la inflación ha sido inducida, si se ha dicho hasta el cansancio que somos víctimas de una guerra económica, ¿cómo puede plantearse precisamente una alianza con el agresor esperando que redima sus delitos pidiéndole de buena fe una conducta piadosa?
  • En cuanto a estimular la inversión extranjera, volvamos de nuevo a lo que dice el [P.P.] en lo que atañe a la materia: "1.3.6.4. Fortalecer el ALBA como instrumento para alcanzar un desarrollo justo, solidario y sustentable; el trato especial y diferenciado que tenga en cuenta el nivel de desarrollo de los diversos países y la dimensión de sus economías; la complementariedad económica y la cooperación entre los países participantes, y el fomento de las inversiones de capitales latinoamericanos en la propia América Latina y el Caribe." Dice además: "1.3.7. Fortalecer los mecanismos de cooperación en el mercado común del Sur (MERCOSUR)." También contempla la inversión internacional en el sector turístico. Así pues, ¿qué clase de inversión extranjera hay que estimular fuera de las directrices del [P.P.]? ¿Cómo? ¿Bajo cuáles condiciones? ¿Porqué el planteamiento no consiste precisamente en fortalecer aun más la integración y seguir desarrollando las inversiones en el seno de ALBA, CELAC, Mercosur y en asociación con nuestros aliados (China, Irán, Rusia), como ha sido hasta ahora con buenos resultados? El [P.P.] también contempla la prudencia frente a las "inversiones" extranjeras, a saber: "4.4.1.3. Llevar a niveles no vitales la participación de las instituciones financieras internacionales en los proyectos de desarrollo nacional." Con mucha seguridad, como han revelado algunas infidencias de sus adláteres, la burguesía [tras]-nacional va a presionar para proveer financiamiento del FMI y otros préstamos de la banca global como forma para hacerse de divisas en el contexto de la baja de los ingresos petroleros, pues no perdamos de vista que una parte muy considerable de los insumos, repuestos y equipos que emplea el parque productivo nacional, público y privado, es importado. Cabe esperar que más temprano o más tarde cuaje la extorsión desde la Asamblea Nacional. Desde luego, las garantías las pondrá la república.
  • El ministro de Planificación, Ricardo Menéndez, aclara muy bien la nueva línea de subordinación a la burguesía y el deslinde del [P.P.] en un giro de 180º, cuando expresa que "no podemos desarrollarnos sin sector privado" [SIC] (Panorama, 19/01/2016). Menéndez hizo un llamado a ese abigarrado "sector" para ser "actores fundamentales en la economía," lo que además no es nada nuevo en la ininterrumpida tradición cuarto-republicana de la pseudo-política de la pequeña burguesía clientelar. El "sector privado" está considerado en el [P.P.] de acuerdo a ciertos parámetros y condiciones bien estructurados y para nada "fundamentales", muy lejos de llegar al extremo de expresar que no podemos desarrollarnos sin depender del lucro patronal. Cuesta trabajo hallar entre las declaraciones del gobierno el convencimiento de que los actores fundamentales deben ser los trabajadores. Pero además se está regando soterradamente la matriz perversa de que los trabajadores venezolanos son incapaces de asumir el liderazgo para recuperar la producción y ordenar la economía, que son parte de la "ineficiencia", que son parte del problema. Los héroes serán entonces los exponentes de una clase que ha medrado por décadas de la renta petrolera, que no ha invertido algo que valga la pena desde el fin de la política sustitutiva, que registra un declive constante de la productividad desde 1970, una clase monopolista y rosquera, que fuga divisas, que no exporta, que especula y corrompe la política. Una clase que siempre busca chivos expiatorios para justificar su rotundo fracaso en industrializar al país. Pero sépase que los países pueden desarrollarse sin patronos, pero nunca sin trabajadores.
  • Por si fuera poco, Menéndez dice que "los desafíos deben centrarse en la eficiencia en la distribución y logística de los bienes y en modificar el esquema de distribución de la renta". Pareciera no haber leído jamás el [P.P.]. El problema para él es distributivo, es logístico, es técnico, esos son sus desafíos. Pero ¿a qué se refiere con eso del "esquema de distribución de la renta"? ¿Es la renta petrolera, o la renta entendida como la entienden los neoclásicos, como ingreso nacional? ¿Qué es lo que ha pasado con la distribución de la "renta" cuando sostiene que hay que modificar su "esquema"? ¿En qué consiste? Tan lastimeras declaraciones están a una distancia astronómica del [P.P.], cuyo eje vertebral reside en la transformación de las relaciones de producción, en el tránsito a un nuevo metabolismo social:
"2 .1 .1 . Impulsar nuevas formas de organización que pongan al servicio de la sociedad los medios de producción, y estimulen la generación de un tejido productivo sustentable enmarcado en el nuevo metabolismo para la transición al socialismo."
El Gran Objetivo Histórico Nº 2 contiene todos los aspectos esenciales de transformación hacia el socialismo productivo bajo un esquema de democracia a fondo (nuevo modelo de gestión), productividad, emancipación del sujeto social y praxis revolucionaria del trabajo ("2.1.4.1. Construir una cultura del trabajo que se contraponga al rentismo mediante el impulso de la formación desde la praxis del trabajo, conciencia del trabajador y trabajadora, como sujetos activos del proceso de transformación y participación democrática del trabajo, orientada a los más altos intereses nacionales") y superación de la explotación capitalista (2.2.1.)" Es decir, el [P.P.], la síntesis del legado del Comandante Chávez, es una formidable herramienta de emancipación y también de lucha.
Menéndez, nuestro ministro de Planificación, desconoce y aborta el Plan de la Patria 2013-2019.
  1. El decreto de emergencia es innecesario porque todo cuanto se requiere para accionar en la presente situación está en el Plan de la Patria 2013-2019. El aspecto crucial es la movilización conciente y organizada del poder popular, de los trabajadores, de las comunidades y de la alianza cívico-militar:
"2.1.1.1. Diseñar estrategias que permitan garantizar la participación del pueblo, aumentando su nivel de conciencia para afrontar cualquier escenario que se origine como consecuencia de la guerra económica."
Por ningún lado del gabinete hay siquiera mención de este objetivo concebido precisamente para la contingencia y para cualquier escenario. El gobierno ha optado por no confiar en el movimiento popular revolucionario, en no movilizar a los trabajadores, en ceder al miedo y al desconcierto, en no articular el poder popular, en aplazar la agonía frente a la amenaza creciente de la restauración neoliberal y el advenimiento del fascismo. No deberá sorprender entonces que la Asamblea Nacional llegue a convalidar este inocuo recurso dilatorio.
Alejandro Landaeta Salvatierra