Roberto
Carlos Palacios / Cátedra Che Guevara – Venezuela
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Hoy se cumplen dos meses del
programa de recuperación económica, cabe preguntarse ¿cuál es el balance?
¿quién se beneficia y quién no? ¿vamos a seguir esperando?
Resulta lejano el promisorio
20 de agosto pasado, todo se resolvería, prometían como si trataran con niños.
Antes de la llegada del 20 de agosto todo era optimismo, el que dudara era
sospechoso, las autoridades anunciaban como siguen diciendo hoy, que tenían la
fórmula mágica para resolver la situación económica, recordemos lo que decía el
actual vicepresidente económico sobre el 20 de agosto antes de su llegada:
“La guerra económica, la guerra de los
precios, la especulación criminal, brutal, tiene su hora y su fin. El 20 de
agosto termina, enterraremos dios mediante, todas las formas y expresiones de
remarcaje, de boicot, de sobre precio, etc., con todos estos anuncios que
recién comienza a hacer el gobierno bolivariano dentro de un programa, nunca
olviden, no es una medida es un programa estructural, radical, revolucionario
económico.” (1)
Hoy es 20 de octubre y aún lo
que afirmaba el vicepresidente El Aisami no sucede, estimaciones de
instituciones privadas ubican en 44.000 bolívares soberanos la canasta básica,
muy por encima de los 1.800 bolívares soberanos del salario mínimo y de las
tablas rasas salariales que se pretenden establecer o se establecieron. Alguien
dirá que esas instituciones privadas son escuálidas y reportan eso para
perjudicar y desprestigiar al gobierno, sin embargo, hay que reconocer que
aunque eso fuera cierto, por otro lado ni el Instituto Nacional de Estadística
(INE), ni el Banco Central de Venezuela (BCV) publican estadísticas desde hace
años. Además, la realidad en la calle de manera cruda y diáfana demuestra que
el salario no alcanza para lo básico, mucho menos para ir al cine en familia
como afirma desde el desconocimiento o el sarcasmo el propio Presidente Maduro.
Es necesario revisar,
preguntarse, quiénes han sido los beneficiados de todo esto, los trabajadores
por ejemplo vieron desvanecerse sus prestaciones sociales, hay quienes tienen
24 años de servicio al Estado Venezolano que de retirarse hoy de su trabajo
recibirían 400 bolívares soberanos por esos 24 años de trabajo, y si lo que
solicitara esa misma persona fuera un anticipo de sus prestaciones sociales
recibiría 0.38 bolívares soberanos. Este ejemplo sirve para ilustrar el
beneficio directo para los empresarios privados, que ya no sólo es que los
costos que representa la fuerza de trabajo están por debajo del 1%, sino que
además los “pasivos” que representaban para ellos las prestaciones sociales de
los trabajadores ya no son tal cosa.
Si hablamos de los precios
acordados nos topamos con la misma realidad que beneficia a los empresarios y
comerciantes en detrimento de los trabajadores y el pueblo en general. Pongamos
el ejemplo de la carne, para este rubro se acordarían precios sólo sobre
algunos cortes de la carne, y el resto se dejarían libres para que los
pobrecitos carniceros y toda la cadena implicada tuvieran un margen de acción,
como si además el precio acordado no estuviera sustentado en el reconocimiento
de los niveles de inflación, cotización paralela del dólar, que regían todo
antes de la reconversión. Lo que sucedió con el precio acordado de la carne es
lo que todos sabemos, los cortes regulados no se consiguen, porque ni el alto
gobierno ni la superintendencia encargada de los precios saben que el
capitalismo no se puede regular ni detener en su afán de lucro. Simplemente, el
carnicero los cortes regulados se los vende más caros a un chino o cualquier
dueño de restaurante, y el resto de los cortes no regulados los vende al precio
que le parezca a los incautos que buscan el precio acordado.
Pudiéramos extender el
balance por ejemplo a lo sucedido con el petro, al respecto el mismo El Aisami
decía antes del 20 de agosto mágico:
“El bolívar soberano nace anclado en un
poderoso activo, el petro, eso le va a dar mucha estabilidad en el tiempo,
además revaluar poderosamente nuestro cono monetario… así también nos va a
permitir derrotar la presión inflacionaria generada por la guerra económica
sobre nuestra moneda, facilitar las transacciones comerciales al estar más
acoplado a la estructura de los precios de la economía actual”. (2)
Obviamente la presión
inflacionaria no fue derrotada, los precios acordados desconocen la propia
dinámica del capitalismo que impulsan, así lo acordado implica unos rubros y
otros no, y los empresarios y comerciantes se mueven hacia los rubros no
regulados, porque además se les entregan divisas para que lo hagan.
El millón de barriles que
prometió Quevedo nunca llegó, ahora lo que promete el Presidente Maduro es el
millón de barriles para los chinos que se producirán “como sea” según afirmó el
Presidente Maduro en el extraño abanderamiento de los empresarios que van a
Shangai como si fueran atletas de la generación de oro. Ese millón de barriles
de petróleo para los chinos será consecuencia de la ilegal entrega de 9.9% de
las acciones de la empresa mixta Sinovensa, ilegal si tomamos en cuenta el
Decreto 5.200 promulgado por Chávez y las alocuciones del propio Comandante: “Bueno, la participación de Venezuela en las
antiguas asociaciones estratégicas eran en todos los casos menor a 50%, o sea
que eso estaba totalmente bajo control de las trasnacionales. Ahora la
participación de PDVSA siempre será mayor de 50% y no será menor del 60%, eso
nos garantiza el control de las operaciones, la soberanía en el manejo de
nuestros recursos, de nuestras operaciones.” (3)
Concluimos el sucinto balance
expresando nuestra convicción de la necesidad de conformar una Confederación
Nacional del Poder Popular, que agrupe a la Federación Nacional Comunal, la
Federación Nacional de trabajadores y trabajadoras y a la Federación Nacional
de la Defensa Integral de la Nación, todas, organizaciones nacionales desde la
base hasta la nación, sin privilegios, sin prebendas; una Confederación
dispuesta a enfrentar los retos que el Estado y el gobierno eluden.
Es Socialismo o la Nada.
Sin Socialismo no hay Patria.
La continuidad de la Revolución es la
Confederación.
FUENTES:
(1) y (2) Rueda de Prensa del
Vicepresidente Económico.
(3) 02/02/2010. Discursos y
Alocuciones. Comandante Chávez. Teatro Teresa Carreño.