La nueva
operación anunciada por Estados Unidos y replicada por los miembros del Grupo
de Lima es el ingreso de “ayuda humanitaria” a Venezuela a través de Colombia,
Brasil y una isla del Caribe cuyo nombre no se dio públicamente.
Washington
pide a los militares de Venezuela en la frontera que no controlen esos
cargamentos, que permitan su ingreso y su distribución por fuera del Estado.
Frente
a esta situación, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, aseguró que “el
gobierno de Estados Unidos es el autor real del golpe en Venezuela” y que
“continúa la imposición de ‘ayuda humanitaria’ como pretexto para la agresión
militar”.
Rodríguez
agregó además que “la Historia juzgará severamente la complicidad de otros”, en
un mensaje dirigido especialmente a otros gobiernos de América Latina. Y días
antes había llamado a la movilización en toda la región para “detener la
intervención imperialista”.
Por
su parte, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, tildó de “tremenda farsa” la
maniobra de la “ayuda humanitaria” organizada por Estados Unidos y el pedido a
las Fuerzas Armadas de que permitan su ingreso. Calificó al gobierno
estadounidense como “un gobierno cínico que negó la ayuda humanitaria a sus
conciudadanos en Puerto Rico tras los huracanes, suspendió la ayuda al pueblo
palestino asediado, que maltrata a niños y niñas en sus fronteras, que genera
guerras sin fundamento y deja crisis humanitarias a su paso”.
El
presidente Nicolás Maduro ya advirtió que no permitirá “ningún tipo de
intervencionismo” y calificó el envío de ayuda humanitaria como un “show
político”