Tomado de Lucha de Clases
A partir del día 18 del mes de
septiembre de 2017, el director de Conatel, Jorge Eliécer Márquez, inició una
serie de despidos arbitrarios, que totalizaron 8 compañeros separados de
sus puestos de trabajo, violando flagrantemente la LOTTT y la Constitución
Bolivariana, padres y madres de familia, incluyendo una delegada del sindicato
por el Edo. Carabobo, y violando además su fuero sindical.
Aunque los trabajadores afectados
se ampararon ante el Ministerio del Trabajo, tal y como contempla la ley, no
recibieron respuesta alguna. Ante tales atropellos, y asumiendo una postura
clasista y consecuente, propia de un revolucionario genuino, el camarada Denny
Brazón, secretario de organización del Sinbtracon (Sindicato Bolivariano de
Trabajadores de Conatel), participó en conjunto con otras organizaciones
sindicales clasistas en una protesta ante la sede del Ministerio del Trabajo,
efectuada el 9 de octubre del año pasado, para exigir el reenganche de los
compañeros despedidos, la ejecución de una serie de reenganches pendientes y la
discusión de una serie de reivindicaciones laborales que fueron violadas en
diversos centros de trabajo públicos y privados, entre ellos la empresa textil
Ovejita, varias imprentas afiliadas al Sindicato de Artes Gráficas de la región
capital (SUTAG) y la Fábrica de insumos 27 de febrero adscrita al Ministerio de
Vivienda, entre otras.
Esta acción de lucha provocó una
respuesta del patrono, quien en enero emitió una calificación de despido contra
el compañero Brazón. Cuando éste último fue hasta el Ministerio a fin de conocer
las razones de la calificación, descubre que el patrono se basó de manera ruin
y fraudulenta en un incidente -por lo demás ordinario-, que tuvo el compañero
Brazón manejando un vehículo tipo camión perteneciente a la institución.
Mientras manejaba dicho vehículo, el compañero colisionó de manera accidental
la llamada “cachucha” del camión, es decir, la parte de la cava que sobresale
en la parte delantera del vehículo, contra un saliente que posee un muro del
área de estacionamiento de la sede principal de Conatel, cosa que por cierto se
ha hecho bastante normal, debido a lo angosto de la zona de paso vehicular
donde está ubicado dicho saliente, por lo que ya el área colisionada está -como
se dice popularmente- “redonda”, de tantos golpes que ha recibido.
El patrono arguyó pues, que el
camarada Brazón colisionó con el referido saliente ex profeso, cuando,r por el
contrario, como ya explicamos, esto se ha hecho absolutamente normal en la
institución, y no hay pues razón lógica ni legal alguna -más que la necesidad
de quitar del camino a un dirigente honesto y combativo que sí pelea por los
derechos de la clase, así como mucha saña por supuesto-, para emitir por dicha
razón una calificación de despido en su contra. Si fuera el caso, ya entonces
hubiesen sido despedidos muchos otros choferes de Conatel. La verdad es que es
un total absurdo haber esgrimido un argumento de tal naturaleza para una
calificación de despido, lo que evidencia cómo en el marco de la aguda crisis
económica y social que vive el país, la burocracia reformista está
profundizando las represalias y ataques contra la vanguardia del
movimiento obrero, a fin de poder profundizar y consolidar su política de
conciliación de clases y su viraje cada vez más patente hacia la derecha, que
además significa descargar sobre los hombros de la clase trabajadora, las
cargas de la crisis.
Cabe destacar además, que si el
compañero Brazón tuvo un incidente conduciendo un vehículo de la institución,
ya fungiendo como dirigente sindical, es porque como obrero honesto,
responsable y comprometido con sus labores -si de algo no puede tacharse a este
compañero, es de no ser un excelente trabajador-, aunque contaba con la
respectiva licencia sindical, y por lo tanto, por ley no se hacía necesario que
cumpliera con sus antiguas labores -el compañero era chofer-, éste no dejó ni
un sólo de día de asistir a su puesto de trabajo y cumplir con sus antiguas
funciones, dando el ejemplo a sus demás compañeros, de laboriosidad, compromiso
y disciplina. ¡Y usa pues el director de Conatel, encompinchado con el Ministro
de Trabajo y el inspector Gregori Rodríguez este argumento barato para despedir
a un obrero clasista, revolucionario y padre de familia!
Para rematar, cabe destacar que
está acción ruin y deleznable se produce justo 4 días después del acto de
ratificación de apoyo del Partido Comunista de Venezuela a la candidatura
presidencial de Nicolás Maduro, en el cual éste llamó al Ministro del Trabajo
Néstor Ovalles, a cumplir “a trocha y mocha” con los reenganches que
están pendientes por ejecución, así como también exigió respeto a la clase trabajadora, a la
estabilidad laboral y al derecho a la sindicalización, entre otros elementos.
Como si ello fuera poco, el día viernes 2 de marzo a primera hora, en una
entrevista concedida a Venezolana de Televisión, el Ministro del Trabajo Néstor
Ovalles declaró “a los trabajadores”, en consonancia con las palabras de Maduro
del día lunes, que “hay un Ministerio de puertas abiertas para ampararlos”.
Horas más tarde, el camarada Brazón recibió su granito de solidaridad clasista
del camarada Ovalles, expresada en el oficio mediante el cual se hacía oficial
la separación de su puesto de trabajo. Quedaron entonces las palabras de Maduro
como palabras huecas o como propaganda demagógica para engañar a sectores del
movimiento obrero, de cara a los próximos comicios presidenciales.
Desde Lucha de Clases – sección
venezolana de la Corriente Marxista Internacional, declaramos nuestra
solidaridad y nuestro apoyo rotundo al camarada Brazón, ante esta vil
arremetida de aquellos que en nombre de la Revolución Bolivariana están
destruyendo el legado del comandante Chávez y atacando las enormes conquistas
sociales que la clase trabajadora logró en la pasada década. Por ello, y
reconociendo que en la actualidad existe una política de ataques hacia las
conquistas y derechos de la clase, llamamos al movimiento obrero clasista a
movilizarnos con fuerza e iniciar una campaña nacional por la defensa de nuestras
reivindicaciones y derechos, y por la construcción de una plataforma obrera
revolucionaria que permita derrotar a la burocracia reformista y a la burguesía
parásita en sus ataques contra las masas trabajadoras. En particular proponemos
que todas las organizaciones sindicales que deseen expresar su apoyo envíen
notas de protesta formales al despacho de la Inspectoría Miranda Este y del
Ministro del Trabajo. Debemos dar un paso al frente en el combate de clase.