El cemento, una materia primaria no solo para
el gobierno venezolano y la Gran Misión Vivienda Venezuela, sino para el pueblo
en general. Hoy, después de una enorme lucha que llevaron adelante los
trabajadores de Vencemos, antigua Cemex de Venezuela en Vargas, con el apoyo
del comandante Chávez, esta empresa se encuentra en total abandono.
Hay quienes culpan a la revolución, sin
entender que no es ella, son los sujetos de carne y hueso que se aprovechan de
ella para hacer desastres, los procesos de cambio no son lineales y
purificados, todo lo contrario, son curvos y complicados, de ser lo primero ya
estaríamos en socialismo, pero no es así, entonces se trata de ser
consecuentes, y no nos referimos a los que dirigen, ellos son consecuentes en
lo que hacen, nos referimos a sus trabajadores, conformarnos con la miseria de
sueldo y pensar solo en eso nos aleja de la realidad. Sin abandonar la lucha
por mejor calidad de vida, debemos rescatar la empresa, aún hay tiempo y se
puede lograr, eso si contamos con el apoyo de todos los trabajadores, unidos,
organizados y en constante movilización.
Hacer entender a estos señores que su juego
perjudica es a la población y no solamente a los trabajadores y sus familias,
es tarea complicada y más cuando son militares, pena debería de darles su
actitud de saboteo, saboteo contra el pueblo, los trabajadores y el gobierno.
Seguidamente un escrito y un video que nos
enviara a nuestra redacción un trabajador que le duele las condiciones en que
se encuentra nuestra empresa:
REFLEXIÓN DE UN TRABAJADOR DE TRANSPORTE
VENCEMOS
En vista de la situación actual de Vencemos transporte, reconociendo lo que haya que reconocer, pero también diciendo lo que se tenga que decir.
Hay palabras o discursos de quienes están al frente de la dirección de Vencemos
que dicen ¡¡pero es que a los trabajadores nunca le hemos dejado de pagar su
sueldo!!.
Correcto, pero esta unidad de negocio transporte es tan importante como
Concreto y Cemento, ya que somos la parte que distribuye tanto la materia prima
como el producto terminado a las diferentes partes del país, y veo con
preocupación como no le dan la importancia necesaria al transporte. Con la
simple excusa, ¡¡pero a los trabajadores nunca le hemos dejado de pagar!!.
Ahora bien, pregonan el socialismo, pero eso no es socialismo, es ser
una unidad de negocio parasitaria de quienes la dirigen. Debe existir la
voluntad para poner a producir con bienes que lo que hacemos en transporte,
prestar un servicio, ya que lo único que piden los trabajadores es salir a
trabajar para poder garantizar un salario digno y ver con moral su trabajo y de
no hacer nada y cobrar un salario mínimo nacional que es por decreto
presidencial, no lo están regalando.
Y lo mejor sería que estén operativos todos los frentes de trabajo y ver
más allá de lo material, es moral nuestro trabajo de chóferes comercial en
Venezolana de Cementos.
Han querido desvirtuar la visión de transporte en todas sus expresiones,
es la hora de emprender una lucha legal laboral en los órganos regulares
pasando por inspectoría del trabajo hasta los tribunales laborales, y sin dejar
de lado las movilizaciones y acciones de lucha de los trabajadores. Apuesto a
que unifiquemos los criterios de lucha y no estar nada más movilizándonos,
denunciar y luego callar no sirve de nada y de haber mesa de trabajo debe
existir el compromiso de ambas partes y que hablemos claro.